jueves, 2 de enero de 2020

POSTALES DE VACACIONES 2020


Los consejos de Dilia Rosa (II)
“Mijo, váyase temprano, es mejor estar adelante que atrás…”
Por El Profe Domingo
Siguiendo con mis POSTALES DE VACACIONES y con las frases-consejos de mi madre, recuerdo esas palabras muy suyas: “Mijo, váyase temprano, es mejor estar adelante que atrás…”. Escuché esto innumerables veces, cuando tenía alguna reunión (importante o no), para ir a una cita médica y, sobre todo, a una entrevista de trabajo.
La frase-consejo que hoy nos ocupa ayudó a que mi carácter se fuese moldeando en un aspecto muy importante en las relaciones interpersonales: La Puntualidad, un valor un poco perdido en nuestros tiempos. Escucho muchas veces la expresión “Pongamos la reunión a las siete, para que la gente llegue a las ocho, por lo menos.” Estamos tan convencidos de la impuntualidad de las personas que nos programamos para aceptar que llegarán más tarde de lo acordado. Es una lastima que esto sea así porque muchas veces estamos abusando de una de las cosas más valiosas que una persona puede tener: el tiempo. Ser puntual en mi región implica que escuchemos una frase muy típica: “¡Tú si eres rayúo!” o “arrayúo” como suele expresar una cándida amiga mía.
Convertirme en una persona puntual, gracias al consejo de Dilia Rosa, ha traído como consecuencia que muchas veces me toca esperar, en soledad, la llegada de las personas con quienes tengo cita o el inicio de algún tipo de evento o reunión.
Sin importar lo que nuestra cultura haya impuesto con respecto a este tema, sigo saliendo temprano a mis compromisos, porque algunas consecuencias positivas de esto son: ganarse el respeto de las demás personas, convertirse en alguien confiable, aprovechar las oportunidades, nuestro tiempo, y respetar el de los demás. Además de todo lo anterior, estoy de acuerdo con mi madre: “es mejor adelante que atrás…”

miércoles, 1 de enero de 2020

POSTALES DE VACACIONES 2020

Los consejos de Dilia Rosa (I)
¡LLÉVATE UN GUINEO!
Por: El Profe Domingo

Quiero iniciar estas POSTALES DE VACACIONES recordando los sabios consejos de mi madre, Dilia Rosa Yime Moncada, como solía presentarse. Después de varios años pude descubrir que en cada frase-consejo había un principio de vida aplicable a cada circunstancia. Debo recalcar que los consejos maternos se remitían a una frase sencilla, pero de alto contenido, nada parecidas a las de los padres de nuestro tiempo, que se sientan a aconsejar a sus hijos, poniendo cara de protagonista de drama gringo y luego le lanzan una conferencia sobre lo dura que es la vida y cómo afrontarla.
¡LLÉVATE UN GUINEO!, fue una frase que le escuché a mi madre alguna vez que debía salir muy temprano, confiado que para donde iba me brindarían desayuno. Gracias, madre mía por ese consejo, porque efectivamente no me brindaron desayuno.
Pero ¡LLÉVATE UN GUINEO!, lleva intrínseco un principio de vida, lo que realmente me enseñó Dilia Rosa fue a ser precavido, a mirar más allá del momento o la presuposición de cómo serán las cosas. Este principio se aplica a casi todos los aspectos de la existencia: al tener cuidado de nuestras palabras, al hacer un negocio, al escoger a tus amigos, etc.
Por eso te comparto el consejo de mi madre: ante cualquier circunstancia que vayas a afrontar y no sepas lo que te espera ¡LLÉVATE UN GUINEO!...